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Del ya merito al no se pudo (jamás)

Por Mtro. Daniel Fajardo

Desde la otra cara de la moneda, hay quienes acusan a los medios de comunicación de ser los principales responsables de los contenidos que aparecen en la Tv y de sus efectos sociales, pero la contraparte puede argumentar que los medios son el espejo de la sociedad y no es que se induzcan temas que tengan efectos sociales sino que las personas, al ver dichas situaciones, se identifican con ellas y refuerzan o inhiben sus comportamientos.

El fútbol es sin duda uno de los fenómenos sociales más indicados para demostrar esta teoría, para el caso aplicado de la Selección Nacional de México, el revisar la manera en cómo los mexicanos manifestamos nuestro sentir hacia la situación que aqueja a nuestro país y lo proyectamos en distintos medios utilizando como pretexto este deporte es algo muy interesante de estudiar.

¿Son en realidad nuestros pensamientos?

Del ya merito al no se pudo, ¿cuántas veces hemos sentido gusto de ver fracasar a nuestra selección?, alguien ajeno a la realidad de nuestro país que realizara un análisis de los diversos contenidos que circulan en redes sociales, programas de análisis y más que hablan del representativo nacional, podrían concluir que la mayoría de los mexicanos queremos que nuestra selección pierda, con expresiones de “¿para qué vamos?, ¡es una pésima selección! o el tradicional “jugamos como nunca y perdimos como siempre” son argumentos contundentes que hacen que muchos de los espectadores de estos partidos realmente los vean para legitimar estos pensamientos y decir “no se pudo otra vez” y no es que éste sea un pensamiento exclusivo del fútbol, cuántos de nosotros minimizamos nuestras expectativas de nuestros gobernantes al decir, “Era mucho paquete para él, ¿cómo quiere cambiar las cosas si no se puede?” ¿no es una forma de manifestar en otro ámbito el “jugamos como nunca y perdimos como siempre?

Teoría de comunicación de masas, el enfoque de siempre

¿En qué momento decidimos usar los medios para propagar esta negatividad del eterno “Ya merito”? lo más peligroso es que al realizarse dicha exposición en medios masivos, las personas que observan esta transmisión o siguen una red social pueden asimilar que el pensamiento es producto de una conclusión generalizada y que es la opinión de la totalidad de los mexicanos, uno de los efectos sociales más comunes es cuando comprendemos que la mayoría ha adoptado una postura y entonces me resulta atractivo pertenecer a ella porque a nadie le gusta ser parte de la minoría que se encuentra en el error.
Y aquí el punto de debate ético ¿por qué no usar este tipo de influencias para generar mensajes positivos que fortalezcan mi identidad nacional y pasemos del ya mérito al Sí se puede? debemos estar muy atentos y sobre todo ser críticos a los mensajes que se difunden a través de diversos medios, la influencia social es un hecho y la construcción de la opinión pública basada en la guía que los distintos líderes de opinión pueden generar es un acto comprobado, se puede generar un contraataque a este tipo de acciones cuando cada uno de nosotros nos cuestionamos los contenidos de un mensaje en medios de comunicación y ejercemos nuestra libertad al manifestar nuestra propia opinión, y es un acto de responsabilidad civil compartirla con los demás.
Muchos caemos en la apatía de legitimar lo que la mayoría piensa sin que ésta sea nuestra forma de pensar, ¿con cuantos de los mensajes, noticias, publicidad y mas que se presentan en los medios de comunicación está usted amigo lector de acuerdo?
Pocas veces quizás nos hemos hecho esta pregunta y debemos ser conscientes si somos parte de una colectividad inspirada en pocos o bien agentes de cambio que lideramos opiniones.