La Danza celebra a México

Para que cualquier manifestación artística pueda llamarse arte me compartió en algún momento un galerista es muy importante que la obra expuesta transmita, te evoque sentimientos y el día de ayer, al mirar el trabajo que Ivonne Robles Gil y su Compañía de Danza Antoinette presentaron con el Proyecto Semblanza Mexicana 2014 creo que no sólo yo, sino el público vivimos una gran experiencia colectiva.
Era curioso como a la par de la música, los asistentes interactuaban con la música, mientras los bailarines en el escenario hacían gala de sus mejores pasos, los espectadores los acompañaban con sonrisas, algunos movían los pies, y lo más interesante, no había un gusto diferenciado, tanto chicos como grandes estaban conectados en un momento que puedo citar como mágico.
Número tras número la demostración artística iba en aumento, sólo había tiempo entre cada coreografía de un breve aplauso, para que el siguiente cuerpo de ballet en presentar estuviera listo en el escenario y tras un corto instante donde la directora de la Compañía afinaba con la mirada los últimos detalles con sus bailarines, iniciaba la música y las emociones continuaban. Que gran trabajo en ritmo tiene esta puesta, y lo repito no hubo tiempo para respirar, gracias a la correcta y adecuada selección de canciones que presenta Semblanza Mexicana, los recuerdos llegaban a la mente de todos, canciones del repertorio:

*Mi México de Ayer
*Los Caminantes
*La llorona
*El Feo
*Moliendo Café
*Bésame Mucho
*Jesusita en Chihuahua
*La Adelita
*La Vikina
*México en la Piel
*Cielo Rojo

Nos transportaban a todos a distintos momentos de nuestra vida, ¿quién puede llamarse mexicano y no haber tenido alguna experiencia en particular con estas canciones? miraba a la gente a mi alrededor y sus rostros lo decían todo, esa es la magia del arte que sin perder atención a lo que ocurre en el escenario, unos cuantos pasos son suficientes para que con gusto no sólo vengan a nuestro presente aquellas memorias que dejaron huella en nosotros, sino además, el oportuno aporte que sólo grandes artistas pueden consumar, que a través de la danza podamos sentirnos orgullosos de nuestro país, de nuestra música y de nuestra cultura. El final es un gran broche de oro:

*El Son de la Negra
*La China Poblana
*El Jarabe Tapatío
*El Huapango de Moncayo

Son piezas maestras de su autora, el cuerpo de ballet sabe ganarse a su público, gran elegancia en cada una de las interpretaciones, para mi, mucho respeto al nivel de quien homenajea a un grande, en este caso el ballet clásico y otras danzas alternativas rinden honores a la cultura mexicana y aunque en otras demostraciones de baile folclórico luce la fuerza y energía, el equipo de Ivonne Robles Gil, no traiciona la delicadeza del ballet para transmitirnos con movimientos muy elegantes la misma profundidad y argumento que un bailarín de Folclor, creo esa es una de las grandes sorpresas que nos presenta Semblanza Mexicana, ver como la danza le hace honor a México.

Poco más de 1 hora dura este viaje lleno de emociones y recuerdos, una correcta elección de vestuario, bailarines de gran nivel de distintas edades, un gran catálogo de versiones en la elección musical y la calidad de su autora, Ivonne Robles Gil, quien como pocas entiende lo que es el respeto al público y la necesidad de siempre presentar espectáculos de gran calidad. Siempre he pensado que el éxito se acompaña simplemente de dar ese esfuerzo extra que pocos quieren dar, la Compañía Antoinette no sólo lo hace en el montaje, nos lo deja grabado en el corazón a todos los que tenemos la oportunidad de verlos en un escenario.

Nota para el lector
* Redacto este breve artículo a título personal y en mi propio espacio, debido a ser el publirelacionista de la Compañía de Danza Antoinette y para mantener en la dirección del discurso oficial de Antoinette la línea editorial sin tendencias. Pero a través de mi espacio jugar con lo subjetivo y hablar como espectador la experiencia que la danza nos dejo anoche a todos.