La selección nacional ahora en cines a través de un documental
Desde la butaca
(Una crítica hecha sin tecnicismos y diseñada para puro palomero)
Y sí, yo fui uno de esos muchos que este fin de semana se puso la de la selección y con mucha Ilusión asistí a la sala de cine más cercana para ver la proyección del documental Ilusión Nacional.
Por L.C. Daniel Fajardo
“Crea fama y échate a dormir” parafraseo el dicho popular que me hizo decidir ir al cine a mirar el nuevo trabajo de Olallo Rubio del cual me volví fan una vez que accidentalmente encontré su documental “Gimme The Power”, y digo accidental porque el material estuvo muy poco tiempo en cartelera, sobre su segundo trabajo, ¿y tú cuánto vales? Me reencontré con el autor-director, nuevamente por coincidencia viendo su trabajo sin saber la autoría y encontrando una línea editorial muy marcada, donde podemos ver una narrativa siempre ágil, irónica y bien fundamentada. Sus trabajos nos presentan siempre distintos cabos “sueltos” que dan al público la oportunidad de relacionar por sí mismos, ese es el valor de su trabajo que más disfruto, el llevar una realidad fundamentada en la investigación a un foro, ser simplemente el canal y dejar que sea el expectador quien decida el rumbo y el uso que quiera darle a la información.
En ilusión Nacional, la primera oportunidad de ver el trabajo de Rubio en pantalla grande, encuentro esa misma línea en un tema oportuno previo a la copa del mundo. El fútbol, un deporte que masifica y que ha sido usado como bandera política y aparente distractor social analizado de tal manera que ningún documental lo podrías hacer, era la premisa que esperaba para este material.
Lo que encontré fue una buena documentación (obligada para este tipo de trabajos) , un buen planteamiento, una excelente edición que le da un buen ritmo a la película, una narración bien lograda y una gran musicalización.
La ambisión por el tema es amplia, los enfoques por abordar muchos y creo uno de los problemas del documental es el tiempo, tras un buen arranque donde el planteamiento del objetivo-justificación del trabajo queda acentuado, las posibles direcciones del trabajo creo se vuelven el principal conflicto teniendo al tiempo como mayor enemigo, ¿profundizar o no en los temas? ¿Continuar la revisión cronológica demostrativa o marcar una línea de análisis que use la crónica sólo como recurso? Creo es el principal conflicto de un proyecto que quiere abarcar mucho y termina quedándose en un análisis superficial.
En Gimme The Power el autor logra hacer de una forma extraordinaria este equilibrio, ¿por qué falla en Ilusión Nacional? Creo, a pesar de todo, el autor sabe quiénes irán a ver su trabajo, el tema es popular, mucha de la gente que irá será por el tema del fútbol y presentar un análisis de algo que sacrifique la crónica y las imágenes de los distintos mundiales puede ser arriesgado cuando la principal expectativa de los receptores es esa.
Para los que sabemos de fútbol y lo vemos más allá de un deporte,el documental no nos dice nada nuevo, para quien no sabe mucho de la parte social y política del mismo, el documental aporta cosas interesantes y de forma entretenida que sin duda cambiarán la visión de este deporte hacia otra mirada.
El sabor que me deja es la de un documental que calificaría de entretenimiento (si es que pudiéramos definirlo con ese término), comunicación inteligente, una forma de producir algo light que te aporta.
El ritmo del material es muy bueno, está bien documentado y sobre todo, la ilustración de cada mundial es impecable. Destaca la música y la narración.
Mis momentos favoritos, sin duda la parte donde México es eliminado por Estados Unidos en la Copa Mundial de Corea-Japón 2002, creo es uno de los instantes ideales donde la irónía y sátira del autor se ven con mayor destreza.
El mensaje de Fox a la delegación mexicana es otro momento divertido.
Un documental recomendable, comercial y entretenido es mi conclusión digno para tener en una videoteca en casa, una vez que salga del cine, o bien en tu lista de favoritos en tu programación de Tv Digital.
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