Debemos aprender a pegarnos la camiseta de nuestro país
“Alguien que le de gusto que a cualquiera de las representaciones de nuestro país (fútbol, atletismo, arte, gobierno) le vaya mal no debería llamarse mexicano”
La participación de la Selección mexicana en competencias como mundiales, justas olímpicas o recientemente torneos de subcategorias, despierta un nacionalismo de moda que se aprovecha no sólo en la generación de productos comerciales, sino también recientemente, en la producción de contenidos.
Al ser espacios públicos, de opinión pública para ser más específicos, los temas que giran en torno a la selección mexicana son variados pero todos convergen en un mismo punto y es preguntarnos ¿qué es lo que debe representarnos la selección de México? Iniciemos con una perspectiva romántica basada en un eslogan comercial, es el equipo de todos. ¡Es México!
Alguna vez comenté, una cosa es que no le vayas a México (equipo de fútbol) y otra que te de gusto que pierda, que desees que le vaya mal. Coincido que quizás el deporte te parezca ajeno y que realmente no te interesa que pueda suceder en la copa del mundo, pero otra cosa es la intención de desearle lo peor a quien simplemente trabaja al igual que tú por lograr un sueño, pero lo peor está cuando se utilizan medios digitales para difundir ese odio que no sólo es para la selección mexicana, porque éste queda rebasado, sino por el país en general.
Argumenté vía Twitter, “Alguien que le de gusto que a cualquiera de las representaciones de nuestro país (fútbol, atletismo, arte, gobierno) le vaya mal no debería llamarse mexicano”; Esa es mi opinión y ¿qué me encontré como respuesta de mucha gente?, fuertes críticas e insultos de varias personas. Me di a la tarea de revisar los perfiles de mis agresores, para encontrar y confirmar lo que en muchos espacios se ha vuelto tendencia, fuertes críticas a nuestro país, la mayoría infundadas y sobre todo, odio y discriminación a otros. Tengo el derecho de escribir lo que siento y pienso como muchos tienen el derecho de retratar sus complejos a través de redes, lo que no se vale es insultar al otro en sus formas de pensar, ¿qué no defendemos la libertad de expresión? ¿dónde queda el respeto? Exigimos manifestar nuestro odio al país pero no toleramos que alguien hable bien de México.
Al final, no es sólo hablar de la selección mexicana de fútbol, siento que es tiempo de cerrrar filas en nuestro país y decidirnos si le vamos a México o no, ¿somos de las personas que les da gusto perder, que deean que a los demás les vaya mal, que digan que nuestro país es una porquería y que merecemos el lugar que tenemos porque es nuestro destino o somos de los los que queremos salir adelante?, Si lees los comentarios de estas personas que atacan a la selección, sinceramente no creo sean distntos en sus opiniones sobre el país, pienso ¿cómo pueden enseñar a sus hijos a querer a su patria cuando se expresan de México de esa forma?
La clave para mi, es aprender a jugar en equipo, nuestra debilidad es que estamos divididos, nos divierte más culturalmente celebrar nuestras tragedias que nuestros triunfos, y a veces los pocos mexicanos que queremos salir adelante y sacar a todo el país, tenemos que remar contra la corriente y contra todos los que dicen NO, que curiosamente se cuelgan de nuestro barco y no ayudan. ¿Le vas a México o no? Creo es una decisión que debemos afirmar todos los días y con ello cerrar filas, porque no sólo es apoyar a un equipo que esté jugando una copa del mundo, también es trabajar con responsabilidad, ser honestos, aprender a valorar las cosas que tenemos como país en recusos naturales, defender nuestra cultura e identidad, todo aquello que nos represente y que nos haga ver como auténticos mexicanos. ¡Por México! ¡Es tiempo de cerrar filas!
