¡Ahora es mi turno! cuando el amor se vuelve una revancha

Por L.C. Daniel Fajardo

Como un juego, se dice que el amor es una batalla, pero para muchos de nosotros a veces se convierte en una guerra que se prolonga aun después de haber concluido nuestra relación. Tensión que parece mantener un ambiente de hostilidad, muy parecido a lo que vivimos en los 80´s con la guerra fría entre los Estados Unidos y la Unión Soviética. Cuidado quien se cruce en medio, o diga públicamente su preferencia por un bando u otro o peor aun, realice el menor pretexto para que inicie la guerra de declaraciones e insultos o cuanta cosa se nos pueda ocurrir y todo por el hecho de haber terminado una relación.

La manera en como termina un noviazgo (o matrimonio) y las situaciones que hayan ocasionado el final pueden crear en nosotros un sentimiento de revancha, donde buscamos desquitarnos de la situación y a veces, sin ser necesariamente así, lastimar a más personas por el hecho de sentirme mal. El amor puede ser por supuesto una revancha, pero como en todo ésta puede tener dos caras.    

No busco quien me la hizo sino quien me la pague, ¡grrr!

Resentimiento, indignación, dolor, angustia, miedo, baja autoestima, son algunas de las sensaciones que tenemos cuando una relación concluyó.

Cuando no cerramos de una forma adecuada el ciclo de nuestra anterior relación, con el tiempo, todas estas cosas que te provocaron terminar un noviazgo (matrimonio) se acumulan dentro de nosotros y como olla Express cuando menos lo esperas y a la menor provocación explotan, ¿cuál es el mejor pretexto? Sin duda, entre muchas posibles, tu siguiente relación o prospecto a galán (a).

Nadie puede decir que en su vida no ha tratado a alguien con la punta del pie cuando tu anterior relación fue un fracaso, ahí tienes a la chica (o) que muestra un interés por ti y, buscando reivindicarte a ti mismo, muchas veces sin ser así necesariamente, haces exactamente lo mismo que te hicieron.

Aunque también puedes ser menos sutil y simplemente cambiar tu trato con las personas que te rodean y por un tiempo ser más agresivo o por lo menos tener la necesidad de ser la persona que tiene el sartén por el mango y de ser tú la (él) que decida las reglas del juego. Lo irónico y a veces patético es que sólo basta que te hable tu ex para que vuelvas a ser esa persona dulce y fácil de maltratar al punto casi de tener una doble personalidad, la del maltratado y el maltratador.

La verdad con el tiempo este tipo de actitudes no llevan a nada, al contrario, a veces si la persona que se acercó a ti sin afán de dañarte, para quererte y darte lo que tu anterior pareja no pudo, y tú la trataste de aquella forma cruel y sólo por buscar quien te la pagara; si en verdad era alguien que te demostró un amor desinteresado, estarás pensando que cometiste un error y dejaste ir la oportunidad que siempre anhelamos, tener a alguien que sinceramente nos de su amor. ¡Cómo si conseguir un buen amor fuera tan fácil!

Nadie tiene la culpa de lo que a ti te sucedió, eso sólo compete a ti y tu expareja, el daño que ambos se hicieron y que ambos se permitieron es cosa de ustedes, pero lo que sucede después es borrón y cuenta nueva.

Perdónate a ti mismo por lo que quedó atrás y por lo que sucedió y perdona la situación que llevó a tu fracaso anterior y quédate en paz contigo, si quieres perdonar a tu expareja eso quedará en ti, ahí si no puedo generalizar, pero por lo menos busca la paz contigo mismo y con la situación que te llevo a tu anterior fracaso.

Si buscas quien te la hizo, por supuesto que habrá quien te la pague, de ti depende elegir como quieres que lo hagan, convirtiéndote en un ser vengativo y encerrarte en un callejón sin salida, o bien darte una nueva oportunidad para amar y buscar que te paguen todo ese amor y cariño con creces.  

¿Un clavo saca a otro clavo?

El dar paso a una siguiente relación debe ser con cuidado, dependiendo mucho de cómo haya terminado tu anterior experiencia, seguramente estarás en busca de alguien que pueda consolarte y para muchos, la mayoría de las ocasiones, es una nueva relación.

Debemos tener mucho cuidado con no precipitarnos, ya que por más ligera que haya sido tu experiencia en tu anterior noviazgo, tenemos que estar preparados para volver a iniciar otro. Con preparación me refiero principalmente a estar bien contigo mismo, estar seguro de lo que quieres y lo que puedes darle a tu pareja. En muchas ocasiones cuando quedamos dolidos por lo general nos comportamos con reservas con nuestra pareja, no lo damos todo, pero la pregunta sería ¿qué culpa tiene nuestra actual pareja de lo que sucedió en nuestra anterior relación?, al igual que tú no tienes la culpa de lo que a tu pareja le haya sucedido, tú estás esperando el 100% porque te lo mereces.

A veces puede suceder esto, creemos que el iniciar rápidamente una nueva relación podrá ser la mejor manera de olvidar a alguien y esto es muy injusto para la otra persona, porque en el fondo, conciente o inconcientemente, buscas el cariño de alguien más para ayudarte a sacar todo lo que no pudiste con una anterior pareja, y en esta etapa de acomodo, pueden producirse diversas fricciones que pueden empeorar tu situación y más, cuando pasa el tiempo y te das cuenta de que no has podido olvidar a tu anterior pareja y que muchas de las palabras que has dicho en tu noviazgo en turno en realidad eran las palabras que quisiste decirle o bien, en el fondo, las palabras y sentimientos que querías sentir de tu pareja pasada.

Recuerda que a todos nos cuesta enfrentar el fracaso y a veces la mejor manera de hacerlo es no reconocerlo, por ello como que tratamos de justificarnos a nosotros mismos diciendo que somos muy buenos y que podemos tener a personas que nos quieran a nuestro alrededor y nos lo demostramos andando con otra persona, pero con el tiempo la realidad nos alcanza y lo que vivimos con nuestra actual pareja no es exactamente producto de un enamoramiento sino de un revancha conmigo mismo, en su mayoría, inconciente.

¿Y por qué no? La vida siempre nos da una revancha

Siempre queda en nosotros la idea de una revancha, terminar una relación nos deja un sabor de boca de lo que pudo ser y no fue, las ilusiones perdidas, los sueños confundidos y la moral por el piso.

Y es una necesidad buscar una revancha, y se vale, lo primero es por supuesto convencerte que tu relación terminó. Si decides tomar este camino, tómalo con valor, deja atrás todo y sigue tu camino.

Cuando la revancha se busca en tu anterior pareja, en darle celos, en mostrarle que no le interesas saliendo con otras personas, ¿Ayudará en algo para aliviar tu sufrimiento?, ¿no es una manera tonta de mantenerte en el?, ¿quién es el que convive con este dolor las 24 hrs. Del día?, seguro a ti te consta que tú le das vueltas y vueltas al asunto durante día y noche, pero de ella (él) ¿quién te lo asegura?, a veces hasta nos inventamos mil teorías de lo que seguro él (ella) dirá cuando me vea, o cuando sepa y a veces lo más irónico es que al final nos damos cuenta de que la otra persona siguió su vida y nos demostró con hechos que todo se acabó, ¡qué necesidad tuviste de llegar hasta este momento para comprobar lo que ya sabias!, ¡se acabó!

Tu revancha es algo personal y es para que tú te sientas mejor, el amor atrae amor, la desconfianza, el miedo y el odio atraen exactamente lo mismo, ¿tienes miedo de que tu pareja te deje?, ¡vuélvete paranoico! Y vuelve realidad ese temor, ¡buscas a alguien que lo de todo por amor!, ¡empieza por darlo todo por amor!, ¿cómo te vas a dar cuenta de que esa persona es lo que quieres si no te pruebas a ti mismo?, si esa persona no lo sabe valorar, tienes argumentos para decirle adiós.

Tu revancha es no volver a cometer los mismos errores, piensa en qué cosas afectaron tu relación, y cuales fueron tu responsabilidad, y no cometas el mismo error, esa es una forma de darte una revancha.

Es tiempo de valorarte a ti mismo y de exigirle a tus parejas porque no quieres repetir otra relación de fracaso. Quieres que te vaya bien y quieres ser feliz, exígete a ti mismo alguien mejor y la (él) que esté en turno que se ponga a la altura, porque a ti no te gusta fracasar y si a la otra persona sí, pues que fracase y que se lastime con alguien más, contigo ya no.

Y si sientes, porque a veces reconozco que es difícil olvidarte de alguien que ya fue, que mejor revancha para aquella persona que te trató mal, que menosprecio tu amor que el que te vea que eres feliz con tu actual pareja, pero no lo malentiendas, no es ir a los mismos cafés de antes esperando que te vea, dedícate al 100% a tu pareja y olvídate de ese mal momento, siempre que seas feliz, lo demás ya no debe importarte porque eso es parte de tu pasado, tu presente es ahora tu felicidad.

Pd. De todos modos si te va súper en tu nueva relación aquel o aquella se va a enterar sin que tú sepas y así será mejor ¿o no? Pero de que se entera se entera así que ocúpate de ser feliz.

Miedo en el amor

Miedo a conocerte a ti mismo, prefieres amar a otro y creer saber lo que es el amor por lo que estás haciendo por otra persona, te conformas con el mínimo de esa fantasía que has creado a tu alrededor sin que esta necesariamente sea cierta.